*Los locos a veces se curan, los imbéciles nunca.
*No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté
escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A
menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que
a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo.
*Las preguntas no son nunca indiscretas. Las respuestas, a
veces sí.
*El hombre puede creer en lo imposible, pero no creerá nunca
en lo improbable.
*La belleza es muy superior al genio. No necesita
explicación.
*Adoro los placeres sencillos; son el último refugio de los
hombres complicados.
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