-Creo sencillamente que alguna parte del yo o del alma humana no está
sujeta a las leyes del espacio y del tiempo.
-Cuando el amor es la norma, no hay voluntad de poder, y donde el poder
se impone, el amor falta.
-Cuando los conflictos más intensos, se superan, dejan una sensación de
seguridad y tranquilidad de que no se perturba fácilmente. Son sólo estos
intensos conflictos y su conflagración lo que se necesita para producir
resultados valiosos y duraderos.
-Cuanto mayor es la multitud, más insignificante es la persona.
-De una manera u otra somos partes de una sola mente que todo lo abarca,
un único gran ser humano.
-Desde la mitad de la vida hacia adelante, solo permanece vital aquel que
está preparado para morir con vida.
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