En
España se sacrifican todos los años más de 100.000 perros en las perreras
municipales. En esos lugares pasan los días que marca la ley, asustados,
maltratados y en instalaciones donde el frío y el hambre les van matando poco a
poco, viven en el corredor de la muerte hasta el momento en el que les quitan
la vida.
Todos
estos animales han sido abandonados por sus dueños, dueños irresponsables que
juegan con los sentimientos de un animal que siente tanto física como
psicológicamente.
Nuestros
gobernantes no se escandalizan ni se avergüenzan de estas cifras, de ser así,
habrían tomado medidas radicales para reducirlas y acabar con este
sufrimiento animal.
Es
indignante que no tomen medidas mediante campañas para ir reduciendo el
abandono de animales en España.
Pero
lo que más indigna es que se permita el tráfico de animales de los países del
este, mayormente de Hungría y Eslovaquia.
Llegan
a las distintas comunidades autónomas de nuestro país una cantidad de más de
3.500 perros a la semana. Una cifra escalofriante si pensamos en la cantidad de
animales que se sacrifican en las perreras porque nadie los adopta.
Son
los viajes del infierno, los cachorros viajan durante 3 días hacinados en una furgoneta.
Muchos
de ellos ni tan siquiera tienen aun los dientes, nadie los alimenta, muchos
mueren en el camino. Cuando llegan a España, son descargados en las
tiendas en las que ya hay cola de espera para comprarlos.
Todos
llegan con sus pasaportes donde figura la vacuna de la rabia. ¿Cómo se le va a
poner a un cachorro de apenas 20 días una vacuna? Muy sencillo, los
pasaportes vienen falsificados.
Para
desgracia de las familias que compran esos cachorros, vienen infectados de
parásitos, algunos contagiosos para el hombre, y un alto porcentaje enferma a
los pocos días de moquillo o parvovirus, llegando a morir en los días
siguientes.
Es
necesario que la gente se conciencie, que adopte y no compre. Que no
participen en enriquecer a las fábricas de cachorros de esos países, donde los
animales viven en condiciones horribles y son explotados para que los cachorros
sean vendidos en España.
*Artículo “Viajes del infierno” de Matilde Cubillo (FAPAM) publicado en el boletín “4Patas” de la Asociación Nacional Amigos de los Animales - ANAA
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